Fotografía de embarazo en Tenerife
Romper el hielo es fácil cuando te pones delante del objetivo de un gran profesional. Lo hemos hecho con la ilusión del primer día que nuestras miradas se cruzaron, que nuestros labios se acercaron para sellar una historia de amor que ha cumplido más de 12 años. Un recorrido maravilloso, no exento de algunos sacrificios que hacen más satisfactoria la llegada a las metas que nos hemos trazado a lo largo de nuestras vidas.
Cuando Sergio nos convocó para esta sesión de fotos no tuvimos dudas, ¡claro que sí!. Teníamos dos opciones, en estudio o en exteriores, pero Sergio lo tuvo claro, nos fuimos de paseo. El lugar tampoco lo dudó, Rojas, un lugar precioso para hacer la sesión de embarazo en la costa norte de Tenerife. Cerquita del mar, de la naturaleza, y por supuesto, de esos últimos rayos del Sol que él sabe que me apasionan. Y el atardecer no decepcionó, dejó que esos rayos se colaran en estas imágenes que encierran a día de hoy todos los elementos que nos hacen felices. El amor, la tranquilidad, naturaleza, la belleza de un atardecer y por supuesto la espera de nuestro bebé, María. Ella es ese Universo entorno al que toda nuestra vida gira en este momento, con ganas, con fuerza, con ilusión, con inquietud, con el desconocimiento de ser primerizos, así esperamos a María.
Y esa espera debía quedar reflejada en estas imágenes que, sin duda, serán el tesoro de nuestro futuro, ese legado que guardaremos en un cofre para que cada vez que los abramos nos embriague de recuerdos e ilusiones. Esas imágenes serán el mejor testimonio del paso del tiempo y, sin duda, reflejarán uno o, mejor dicho, el momento más bonito de nuestras vidas.
Gracias Sergio por dejar constancia a través de tu buen hacer de este maravilloso momento.
María, Raúl y…María.
